“El problema del cine español es el ministerio y la dependencia televisiva”

Kepa Sojo, director de cine y profesor de la UPV

Kepa Sojo, profesor de la UPV en el campus de Álava y director de una película y varios cortometrajes, fue entrevistado el pasado día 6 de mayo en el hotel “la casa del padrón” en Murgía, Álava.

Kepa Sojo estudió la carrera de historia del arte en la UPV del campus de Álava y luego hico un máster de historia del cine durante un año en la universidad de Valladolid. Actualmente, con sus 45 años es profesor del Máster CYXAC, Conservación y Exhibición de Arte Contemporáneo en Bellas Artes y profesor en historia del Cine e historia del arte. Empezó dando clases en la facultad de bellas artes del campus de Leioa y luego en la facultad de letras de Vitoria.

Según Sojo, el problema del cine español es “quienes están arriba, es decir, el ministerio”. Declaró que las ayudas en España son escasa en esta época de crisis y por tanto, “desgraciadamente, el cine es lo primero que cortan”. Sojo puso el ejemplo de Francia en donde el cine está muy promocionado por su gobierno y la gente defiende el cine francés. En cambio, según Sojo, el cine español es lo contrario: “en Francia, la cartelera de diez películas contiene cinco francesas y aquí, la cartelera está llena de películas americanas, alguna europea y una o dos españolas”. Apuntó que hay buenas películas todos los años, aunque “evidentemente, no todo lo que se hace es bueno, pero eso también pasa en America, Francia o ningún lado”.

Sojo garantizó que el problema también del cine español es “mucha dependencia de la televisión cuanto al cine”. Argumentó que a la hora de montar una película, te obligan a que estén en el reparto los actores de moda como los de series como El Barco. “Ciertamente, yo pienso que no debería ser así, está muy matizado el tema de la televisión con respecto al cine”.

Sojo hace cortometrajes de comedia. Se basa en anécdotas o experiencias para sacar ideas a sus cortos, “yo tengo mucha imaginación y me gusta mucho el absurdo cuotidiano de la vida por así decirlo, cualquier situación me vale”, afirmó. Sojo también manifestó buscar referentes en grandes directores como Alfred Hitchcok, John Ford o Orson Welles e intentar tomar prestado cosas de películas o series que gustan. Afirmó que “no se plagia ni se copia, sino se coge ideas de un lado y de otro para darle una unidad”.

Como cineasta y autodidacta, Sojo ha rodado una película, “Elsíndrome de Svensson”, rodada en zonas de Valencia, y cuatro cortometrajes. Empezó una tesis doctoral sobre Berlanga en 1994 relacionado con la historia del cine. Hizo cursos en bellas artes de Madrid que consistían en grabar cortometrajes supervisados por Berlanga y en 1997 acudió al festival de cine de Medina del Campo como espectador y periodista para revistas de cine. “Y de la manera más tonta, un año fui con mi primer corto, <<cien maneras de hacer el pollo al txilindrón>>, y gané dos premios”, afirmó Sojo. Actualmente, con su último corto, “loco con ballesta”, ha ganado uno de los mismos premios que ganó en 1997. Otros de sus cortos son “platos sucios”, “looking for Chencho” o “cuando puedas”.

Ha participado en sesenta festivales con cada cortometraje y diez festivales con el largometraje. Uno de los que participa actualmente es el FANT, Cine Fantástico de Bilbao. También ha sido seleccionado en Torrelavega, Cantabria, y en un festival de cine norteamericano en Washington, EEUU.

Estudio público

Según Sojo, estudió en la UPV porque es del País Vasco y siempre ha estudiado en la pública. “Yo nunca he ido nunca a un centro privado, siempre en la pública y ahora también estoy trabajando allí, en la pública, y por tanto siempre digo una tontería, y es que  quiero demostrar que la educación pública vale para algo, que conmigo por lo menos ha servido”, dijo Sojo. Afirmó que no hacía falta ir a universidades caras con nombre para salir adelante.

A pesar de todo, Sojo aconsejó a la gente  ir al cine y consumir de manera legal lo relacionado al cine, como la compra de DVDs.  “Animo a la gente a asistir a los festivales para ver cosas que habitualmente no se puedan ver porque merecen la pena”, manifestó.